El arrendamiento puro, ha cobrado a últimas fechas un auge importante como fuente de financiamiento, ya que permite ventajas tanto financieras como fiscales, que ningún otro tipo de financiamiento ofrece entre otras las siguientes:

• Se puede anticipar la deducción fiscal de un bien que se “compra” a través de la figura del arrendamiento puro, dado que las rentas son consideradas como gastos deducibles, por lo que si se renta un bien que normalmente se depreciaría a diez años por ejemplo con un arrendamiento puro a un año, es factible “depreciarlo” prácticamente en un año a través de las rentas registradas como gasto.
• El contratar un arrendamiento puro no se refleja en sus estados financieros como un pasivo, dado que técnicamente no se esta recibiendo un financiamiento sino un bien arrendado, lo que mejora la posición financiera de la empresa que se ve menos endeudada.
• Nos permite el hacer deducibles que de ser comprados de contado o mediante otro esquema financiero no serían totalmente deducibles, como lo es en el caso de automóviles cuyo valor sea mayor a los ciento setenta y cinco mil pesos más IVA, ya que un automóvil, por ejemplo, de trescientos mil pesos, si se compra de contado únicamente una parte sería deducible, y a través del arrendamiento, se puede ajustar el modelo para que las rentas mensuales no sean mayores a seis mil pesos mas IVA, lo cual hace deducibles totalmente las rentas,  y que al final del plazo el automóvil nos sea vendido en un precio igual o menor a los ciento setenta y cinco mil pesos más IVA, y deducir este valor residual completamente.
• Podemos también a través de este esquema, convertir activos fijos en efectivo por medio de una operación llamada sale and lease back, que consiste en que la empresa le vende un maquina, por ejemplo, a la arrendadora, la arrendadora le paga la maquina a la empresa, y comienza a arrendársela a un plazo acordado, al final del plazo, la arrendadora le vende a la empresa nuevamente la maquina a un valor que usualmente es entre el cinco y el diez por ciento del valor de venta original. 

Ante este escenario, las grandes arrendadoras han venido operando ya en México, algunas nacionales apoyadas en operaciones de “factoraje”, es decir una vez que otorgan la línea de arrendamiento, descuentan su cartera con algún banco, con el objeto de obtener fondos y poder seguir fondeando proyectos, y algunas internacionales que operan muchas de ellas con recursos propios, y sin descontar con los bancos nacionales.

En conclusión el arrendamiento puro, ha venido siendo una herramienta importante para las empresas, para obtener financiamiento y al mismo tiempo tener ventajas fiscales que por otros medios, incluso por el pago de contado, no obtendría.

C.P.C. Juan Antonio Guzmán Acosta 

Socio de Auren México experto en temas Fiscales y Contables

Auren Bajío