Elementos generadores de valor empresarial

23/06/2020

El valor de una empresa en funcionamiento no se encuentra en uno o varios elementos de su patrimonio, sino en su capacidad futura para generar excedentes de liquidez.

Los balances dicen muy poco de esa cuestión y, de hecho, la mayoría de esa capacidad reside -más bien- en las cuentas de resultados

Recientemente, un colega abogado me pedía consejo para la valoración de una empresa de maderas nobles. “Necesito un especialista en valoración de empresas con gran conocimiento de maderas nobles”, me comentaba. Yo le contesté que las únicas maderas nobles que conocía son las de algún mueble que otro que tengo en el salón.

Para nada me sorprendió esta solicitud, es un error muy común cuando se piensa en valor de una empresa. De forma indirecta, creo que mi colega estaba pensando en el valor de liquidación de la empresa. La deformación contable – legal nos lleva a pensar que el valor de una empresa es su valor patrimonial, es decir, la diferencia entre sus activos a valor de venta en la actualidad y sus deudas reales.

Asociar el valor de una empresa en funcionamiento a su valor patrimonial supone, por un lado, que la estamos haciendo morir, que la liquidamos. Por otro lado, es, sin duda alguna, una minusvaloración de los activos reales y las capacidades de la empresa. Al hacerlo es exactamente igual que si un antiguo agricultor valorase su caballo de carga por su poder de nutrir la tierra a su muerte y no en función de su capacidad para arar el campo. Los activos contables en sí mismos no son especialmente relevantes a la hora de valorar una compañía, lo son en función de que estos activos sean capaces de colaborar en la generación de tesorería.

Sin tesorería generada, el motor de la empresa, que no es otro que su cuenta de resultados se ve obligado a parar; la empresa no tiene actividad y, por tanto, la salida final es la liquidación de activos para pagar sus deudas (que habitualmente no puede y por tanto se produce la pérdida del capital invertido por el empresario). En consecuencia, los elementos generadores de valor están íntimamente asociados con aquellos aspectos que generan liquidez libre, es decir, aquella liquidez que podemos utilizar para remunerar a los que financian el negocio de forma permanente (Entidades financieras y Propietarios), sin riesgo de descapitalizar nuestra compañía.

Fundamentalmente:

  1. El resultado de las operaciones: La capacidad de la empresa para generar ingresos por encima de sus costes operativos. Depende fundamentalmente de la posición competitiva de la empresa en su mercado, que le permite en última instancia conseguir mayores cuotas de mercado a precios que compensan los costes en los que debe incurrir y generan un margen de beneficio
  • La tasa impositiva: La tasa de impuesto sobre beneficios no debe desalentar al capital al emprendimiento, ya que a tasas muy elevadas el resultado operativo generado no contribuye finalmente a dejar excedentes de liquidez y por tanto no recompensa el riesgo inherente a cualquier actividad empresarial.
  • El nivel de inversiones estructurales necesario: Si el resultado operativo solo es alcanzable a través de cantidades ingentes y constantes de inversión, la liquidez nunca llegará a estar disponible.
  • La gestión de los capitales asociados al funcionamiento del negocio: El resultado operativo debe producirse asegurando la máxima rotación de los capitales invertidos en las operaciones (clientes, Existencias y proveedores), si no es así el excedente de liquidez no existe por que o bien está materializado en clientes- existencias o se deriva hacia los proveedores.

En definitiva:

  • Posición competitiva, Fiscalidad, Necesidades de inversiones y gestión de los capitales circulantes son los elementos claves para generar excedentes de liquidez.
  • Cuanto mayor sean los excedentes de liquidez, mayor disposición de fondos habrá para atender a Entidades financieras y Propiedad y, por tanto, a ojos de estos últimos y muy en especial de los propietarios el valor de la compañía tenderá a aumentar.

Ahora creo que todos ustedes entienden por qué no es tan relevante el valor de las existencias de maderas nobles. Lo es, aquello que podemos hacer con ellas para generar excedentes de liquidez.

Fernando Alvarez, Socio Auren Corporate

  • Servicios

  • Sectores